Volvemos con los azules. Hay dos colores que mencionamos en la anterior sesión que eran naturales pero de los que también se consiguió su versión artificial. El azul ultramar, que provenía del lapislázuli, una piedra preciosa que abundaba en lo que sería la actual Afganistán y que tenía un coste bastante elevado. La alternativa, la artificial, fue el azul ultramar sintético. El otro era el azul índigo, que se obtenía de una planta. Hoy descubrimos, entre otros, los azules de Prusia, egipcio, cobalto, han, cerúleo o el esmalte. Escúchalo